El milagro de las ventas de garaje en Cuba

Por Esther Zoza

HAVANA TIMES – En estos días de apagones, para aligerar el estrés de mi madre, decidí  vaciar los clósets de casa.  Por supuesto tenía una estrategia muy bien planeada: una venta de garaje. Desafortunadamente no tenemos garaje, portal ni jardín pero seleccionar y fijar precios tendría a mi madre entretenida.

Los cubanos de a pie siempre estamos guardando cosas para después.  Ese tiempo impreciso casi siempre tiene connotaciones familiares. Uno nunca sabe si algún miembro vivo de nuestro árbol genealógico puede necesitar algo. Por esta razón los clósets y una habitación donde se almacenan cosas se convierten en escenario de reencuentro de diversas generaciones. 

Clasificar la ropa y lograr que mi madre se desapegara de su memoria afectiva, tomó una semana.

En el trascurso de dicha semana continuaron los apagones, pero ella dejó de arrodillarse a pedirle al Señor por la salud del refrigerador, el televisor, mi computadora y los ventiladores. Abandonó la esclavitud de cocinar en las madrugadas, de salir a la caza de velas y paquetes de algodón para fabricar pequeñas lucecillas. En las reuniones con sus amigas volvieron a escucharse las risas.

Las conversaciones sobre los alumbrones, apagones, necesidades y carestías se pospusieron. Todas se sumaron a la búsqueda de ropas en desuso, que se habían negado a cambiar por el tan codiciado queso que venden en el mercado clandestino. Fue tan genial que comencé a gestionar la utilización del área común de nuestro edificio para una venta colectiva. Gestión que no rindió frutos, pero mantuvo por un tiempo el buen ánimo de todas.

La venta de garaje, peculiar modalidad comercial para los sectores menos favorecidos de la población cubana llegó para quedarse. Nadie puede cuestionar su Don de entusiasmo aun en sus proveedores. Los amigos pasan a mirar, a comprar o llevar.

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Esther Zoza

Nací en la década del 60. Amo a mi país y a su gente sencilla y sacrificada. Gusto de las artes, en particular la literatura. En la música disfruto de la trova tradicional y contemporánea, también de la ópera y la música instrumental. Respeto todas las religiones. Me gustan los temas esotéricos y místicos, además disfruto de los enigmas del universo. Creo sobre todas las cosas en Dios. Soy persistente y disciplinada para cumplir mis metas. Me gusta el campo. Vivo cerca del mar. Creo en las relaciones de pareja y en el amor en todas sus manifestaciones.