Homocarroñero
Erasmo Calzadilla
HAVANA TIMES — Si yo le dijera, compatriota, que los cubanos somos unos puercos y unos gallinas ¿Usted se ofendería o molestaría? Probablemente sí.
O tal vez no, tal vez piense que gallina es un buen adjetivo para quienes han aguantado medio siglo sin chistar; y que lo de puercos nos viene como anillo al dedo considerando la higiene de nuestras ciudades.
Pero no, no era esa mi idea. Afirmo que somos puercos y gallinas porque esos animales constituyen nuestra fuente proteica principal, y según reza el proverbio: somos lo que comemos.
Deberíamos construirles un altar o al menos tratarlos con deferencia por habernos ayudado a resistir el vendaval; y sin embargo…
No solo proteínas
Humanos al fin, los alimentos que ingerimos están cargados de valores espirituales que se integran bocado a bocado a nuestro ser.
Resulta curiosa y triste nuestra tendencia a asociar los animales más comunes en la dieta con cualidades tan negativas como la cobardía y la falta de aseo.
En otras regiones del orbe, comunidades mejor integradas a su entorno natural respetan (y hasta reverencian) a los seres de que se nutren. Algunos llegan a considerar que su ingesta les aporta coraje, inteligencia, prudencia u otros bienes espirituales.
Nosotros, en cambio, actuamos como arrogantes depredadores sentados en la cumbre de la cadena evolutiva. Y en consecuencia, casi como un castigo por andar escupiendo pa’ abajo, terminamos llevándonos a la boca a los mismos seres cuya dignidad hemos previamente mancillado, animales cargados de valores negativos, carroña espiritual.
Podrá subirnos la hemoglobina pero el alma quedará desnutrida con semejante dieta. Y escaseará la moral para combatir la injusticia.
Más tengo fe en el mejoramiento humano. Habrá en Cuba un día otro magnánimo Paseo que en lugar de feroces leones, símbolos de un poder violento y sanguinario, luzcan sus pedestales broncíneas gallinas cluecas y puercas paridas.
Estuve en Cuba hace poco y ni puerco pude comer. Una gallina que mató mi mamá y el resto de la semana a punta de atún.
Antes pensaba que lo peor de nuestra alimentación era la escasez de proteínas. Ahora noté la ausencia de las dos porciones de fruta y de las tres de vegetales que se deben cumplir en el día.
Y peor es lo que bebemos. La calidad del agua es preocupante.
Es peor porque en algunos lugares ni agua hay
Ja, ja ¡Esto lo escribiste después de bajar un buen fricasé de puerco, o un señor arroz con pollo! De cualquier modo, válida la reflexión.
Ya Erasmo sé está quedando sin ideas claras para escribir,esto de ahora es deprimente,lo mejor que he leido de él fué un comentario sobre la calidad del pan de la cuota,deberia seguir en esa linea,le quedó muy bien,los pronosticos que hizo sobre las elecciones en Venezuela fueron 100% desacertados.
Respecto a mis predicciones sobre las elecciones en Venezuela ¿en qué fallaron?
Dije que había 3 opciones posibles. En una de ellas ganaba Chávez y seguiríamos en esta lenta lenta agonía que no nos acaba de matar. ¿Es que usted ve alguna mejoría?
No sé dónde usted vive, si lo aimentan en la UCI o en una unidad militar, pero en Alamar y otros barrios humildes, el encarecimiento de los alimentos es alarmante. Las mismas zanahorias que en el invierno pasado costaban 7 pesos el mazo, ahora cuestan $ 10. Lo que significa un aumento de más del 20% respecto al año pasado, que a su vez, según una nota del timorato Granma, había significado un aumento del 20% respecto al año anterior. Aunque ya se pueda comprar carros y casas, visitar hoteles, montar un negocio y salir del país, el pueblo humilde, que es la inmensa mayoría, cada vez es más pobre, vive peor, hay más mendigos y viejos pidiendo en la calle etc. La gente joven y talentosa aprovecha y escapa de un país sin oportunidades. Entonces ¿en qué me equivoqué?
Muy buen texto, Erasmo. Totalmente de acuerdo contigo. Para quienes somos omnívoros también es importante rescatar esa dimensión espiritual de lo que ingerimos. El diseño del sistema-mundo nos arrastra hacia la vorágine del consumo desequilibrado y superficial. Y no es que en Cuba consumamamos tanto (al menos los de abajo), sino que la calidad de lo poco que consumimos es pésima. Quien se tome el cuidado de leer las sustancias que contienen los sobrecitos de refresco instantáneo (ya hace mucho tiempo que no los tomo) se asombrará de lo que está poniendo en su organismo.
Otro tanto debe endilgarse al mecanismo industrial criminal que procesa los alimentos, sobre todo aquellos de origen animal, a través del cual son torturados estos seres vivos. Pienso que hacer visible esos detalles colaborarían a que más individuos sensibles repiensen y rediseñen sus dietas con lo que tienen a mano (que tampoco es mucho, por cierto)
Con ingenio siempre das con las ideas… Sin dudas, Erasmo lo tiene…
Bonito el dibujo de Onel. No te preocupes por la policía comentarista.
Que interesante artículo, en lo personal trato de cuidar mi verbo pero nunca me había puesto a pensar los decretos que incoscientemente hacemos al referirnos a los alimentos, gracias por tomarte el tiempo para compartirlo.
El año pasado estuve tres veces en Cuba, amo ese lugar, porque a pesar de las carencias la parte humana en su población florece aunque no se den cuenta, admiro su inteligencia porque no tienen cortinas con signos de dólar que la opaque, porque al final no es más el que acumula más, sino el que conoce el valor de lo que posee.
Gracias por compartir tu artículo.
Éxitos!
Bien se ve que no conoces San Jose de Costa Rica, la ciudad mas puerca del universo! orines en las esquinas y siempre mirando pa abajo al mejor estilo Delhi… A pesar de los pesares Cuba esta limpiecita al lado de este pais donde los rios son los mas cochinos y contaminados y eso que son abanderados de la ecologia…no se de cual???
Un saludo Onel. Geniales tus dibujos. Espero verte pronto por G y poder seguir compartiendo con nuestra amiga “Albahaca”.
Un socio tuyo desde la madre Patria!