Inspección del pensamiento a su propia fábrica

Erasmo Calzadilla

Mi invitación es: no nos entretengamos tanto con los productos del pensamiento. Foto: Caridad

Unos de los servicios más importantes que puede brindarnos la filosofía es enseñarnos a pensar. Sin embargo a mi me parece que la manera tradicional (la que yo he visto) de abordar la enseñanza de la filosofía y su historia no está aún concebida para conseguir este propósito.

En los libros y cursos de filosofía generalmente se estudian las ideas fundamentales de cada época, se critican y se ofrecen alternativas, se hilvanan con otras ideas pasadas, futuras o contemporáneas, pero casi nunca se profundiza en el procedimiento mismo por el que las ideas son engendradas.

El análisis de tal procedimiento a menudo queda oculto y poco se hace por desentrañarlo, sin embargo grandes filósofos, como Aristóteles, Hegel y Mach si han dedicado mucha energía en descubrir el “mecanismo” ideogenético.

Voy a mostrar lo que digo con unos ejemplos. Cuando en filosofía se trata a Tales de Mileto, uno de los primeros sabios griegos, se habla de su búsqueda de un principio de todo lo que existe, y de su distanciamiento del mito, sin embargo nunca he topado con un análisis acerca del camino que llevó a este hombre a considerar que debe haber un principio para todas las cosas, y que este ha de ser uno y no múltiple.

Hasta que no dominemos las técnicas del pensar, no habremos aprendido a valernos por nosotros mismos y no podremos enseñar a nadie a hacerlo. Por ello creo que el enfoque con que se estudia e imparte la filosofía y su historia ha de cambiar radicalmente.

Ella debería enseñar no solo a hilvanar evolutiva y coherentemente ideas ya gestadas, sino entrenar en los métodos para engendrarlas, métodos que sean formales, ejercitables y perfectibles como los matemáticos.

Veamos el ejemplo de Leibniz. Este sabio del siglo XVII era al mismo tiempo filósofo y matemático. En el marco de esta última ciencia descubrió el cálculo diferencial, método empleado profusamente a partir de entonces para resolver los más variados problemas. Ahora, ¿qué es lo que la filosofía estudia de Leibniz? ¿Conoce alguien cuál fue el método con el que Leibniz construyó/descubrió las mónadas? ¿Alguien ha usado conscientemente este método para resolver otros problemas?

Los resultados filosóficos de Leibniz son mejor conocidos, como es el principio de la razón suficiente, pero no lo es en cambio su técnica del pensar.

Mi invitación es: no nos entretengamos tanto con los productos del pensamiento: las ideas, los valores, los sentimientos etc.; conduzcámonos mejor, y en lo posible hacia la fábrica misma donde se gestan y participemos activamente en su creación.

Erasmo Calzadilla

Erasmo Calzadilla: Qué difícil me resulta introducirme en público; lo he intentado muchas veces pero no me sale. Soy más menos lo que aparento en mis post, añada algunas cualidades impresentables y revuelva; con eso debería bastar para un primer acercamiento. Si quiere profundizar un poco más pídame una cita y espere respuesta.