Identidad de Clase en Cuba

Erasmo Calzadilla

Carros de venta.  Foto: cubadbate.cu
Carros de venta. Foto: cubadbate.cu

HAVANA TIMES — Asombrosa reacción de la urbe habanera ante los altos precios de los autos en el flamante mercado estatal. Muchísima gente a quien no alcanza ni para terminar el mes, escandalizada con la noticia, como si de entre las manos le hubieran arrebatado la posibilidad de adquirir un vehículo.

¿Será que la mentalidad Clase Media está cobrando terreno en el imaginario popular? no encuentro otra explicación.

En los primeros días de este año entró en vigor un nuevo código de Trabajo que legitima la explotación y continúa traspasando poder del obrero al jefe. ¿Cuál fue la reacción de los trabajadores? Casi nula; nadie en la calle hablaba del asunto.

Y en el ciberespacio (dominado por lo que yo llamo, sin ánimo de ofender, perspectiva gusana) apenas levantó ronchas.

La perspectiva Gusana y la de Clase Media se parecen, pero no coinciden cien por ciento. Por ejemplo, si la policía maltrata a las Damas de Blanco o detiene durante tiempo indefinido a un disidente que le ha dado por gritar en plena calle sus ansias de libertad, la reacción popular es más bien pálida.

Hay una larga lista de derechos elementales que el gobierno pisotea sin disimulo pero la gente sobrelleva el yugo.

Es muy cómico, entonces, que el “pueblo” se alebreste y consiga esa resonancia que da sentido de fuerza y pertenencia, no por el desabastecimiento de los agros o el impuesto del 250% que grava artículos de primera necesidad, no por la mala calidad de la educación y la salud, siquiera por la libertad y la democracia, sino porque a la clase a la que siente que pertenece le recortaron las plumas de las alas.

Erasmo Calzadilla

Erasmo Calzadilla: Qué difícil me resulta introducirme en público; lo he intentado muchas veces pero no me sale. Soy más menos lo que aparento en mis post, añada algunas cualidades impresentables y revuelva; con eso debería bastar para un primer acercamiento. Si quiere profundizar un poco más pídame una cita y espere respuesta.

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33 thoughts on “Identidad de Clase en Cuba

  • gran Erasmo, coincido contigo 100%

  • Erasmo, creo que es algo más profundo y es el resultado de los mecanismos de control social que tiene el gobierno para que no se mueva la situación. Los que se revuelvan contra el Nuevo Código de Trabajo, se buscan problemas y lo saben por toda la experiencia anterior de ellos mismos o de sus antecesores. Los que se pronuncien contra los paupérrimos salarios , los altos precios a los productos de primera necesidad, sufren represalias de distintos tipos y bien le va si lo dejan libre de represalias, pero no lo escuchan. Si frente a las necesidades cotidianas y a los servicios de educación y salud, ya se pronunciaron en el 2007 y nadie los oyó, menos se atreverán con los temas más tabús de la libertad la democracia y la represión contra los disidentes. Sin embargo pronunciarse contra los precios exorbitantes de los carros, no tiene represalias, los precios están a la vista de todos y no pueden decir que son precios inventados por las campañas “enemigas”, así que no es una identificación subjetiva con una clase diferente a la que están, es la protesta social espontánea sin represalias. La gente ni es “bruta” ni “apática” sabe muy bien a qué se enfrenta y valora los costos y beneficios.
    Saludos.

  • Erasmo pienso que en la conciencia colectiva del cubano se ha intoducido la idealizacion de las cosas: Casi nadie en cuba y muy pocos aqui(Miami) tiene el dinero suficiente para comprarse un carro frances en casi 300 mil dolares, pero en ambos lados muchos sueñan con pasearse en el por el malecon,como si 50 años de protagonismo de dos hermanos lastimara el ego de todos o como si la vanidad se hubiese afincado en la psiquis de muchos. Un amigo de mi hijo me lo ejemplificaba asi: Con un Mercedes en la puerta de mi casa en la saguecera no soy nadie, con un Kia picanto del año de la corneta en mi viejo barrio de Vieja Linda soy un personaje. Por algo sobrevive por generaciones aquel publicitario que oi de chico y que decia.. UD tambien puede tener un Cadillac!!!

  • Yo pienso que mucha gente en Cuba desea poder adquirir cosas, las que quiera, las que necesite; con el producto obtenido de sus negocios y su trabajo. Y el precio de los carros ha dejado clarísimo que no va a ser así.

    Una cosa que no entiendo, si va a desaparecer el CUC, ¿Por qué le pusieron los precios en esa no-moneda condenada a desaparecer?

    En algún momento vamos a tener que hablar nuevamente en pesos, pesos simples, y es mejor desde ya aprovechar el nuevo negocio para ir acostumbrándonos a los números grandes. Así ya sabríamos que el rango de precio de los carros en Cuba va desde 1 Millón hasta 7 millones de pesos.

  • “¿Será que la mentalidad Clase Media está cobrando terreno en el imaginario popular? no encuentro otra explicación.”

    O no estás pensando mucho, o no conoces bien al ser humano. No encuentro otra explicación.

  • Será que la gente se irrita porque lo permitido es inalcanzable para el bolsillo; es decir, porque Cuba se está metiendo de lleno en un capitalismo donde quien tiene dinero es libre de todo y quien no lo tiene no puede hacer nada.

  • Pero no te quedes en la intriga. Si conoces tan bien al ser humano y tienes una mejor idea, compártela brother, no seas tacaño.

  • Mira Erasmo (La E te la pongo en mayúscula en señal de respeto):
    Supongamos que eres padres de 3 niños a los cuales un día les prometes –de manera muy seria y convincente– pasarse las próximas vacaciones completas en la Luna, pues estás seguro, y así les informas, de que lograrán ser los 3 mejores estudiantes del mundo. Ellos saben que no lo son, ni lo serán por mucho que se esfuercen; como puede que tampoco les interese (al menos a alguno de ellos) pasarse 2 meses en un lugar tan frío y distante como la Luna. Sin embargo, muy probablemente se pasarán el resto del día hablando de eso. ¿Por qué?

  • Puedes explicar de otra manera? No he entendido tu parábola.

  • En cuanto a la “persepectiva gusana”, desde que el malgobierno decretó el despido de un millón de trabajadores, y las focas de la CTC no dijeron ni hostia, muchísima gente ha criticado hasta la saciedad el problema. Lo del anticódigo de trabajo, igual. Lo que me parece un poco exagerado es esperar que los que vivimos fuera, y que ya nos libramos de esa calamidad de sistema que se malvive en Cuba, protestemos más que los que se están comiendo el cable crudo. Entiéndase bien lo que digo: nosotros criticamos lo que haga falta y cuanto haga falta (Y ejemplos se sobran), pero lo que es absurdo es que seamos los que más critiquemos, cuando no somos los que sufrimos en carne propia el malgobiernio cubano. Primero mil veces tiene que armar la gritería el que está sufriendo el problema en vivo y en directo, porque tambien ocurre que, cuando la “perspectiva gusana”, dice lo que realmente habria que hacer en ocasiones, nos contestan muy frescos: “Eso lo dices tú muy fácil, porque ya no vives en Cuba” ¿Estamos? Las cosas, como son.

  • Mantener un carro es caro, las personas piensan que es comprarlo y ya. La gasolina cuesta, el mecanico cueeeesta, las piezas supercuestan. Personas con carros, lo han vendido porque no pueden mantenerlo. Cuanto cree que costaran las piezas de los bichos esos, cuando de Lada y otros bodrios, que ruedan por no hay quien las compre, entonces hay que dejarse de comer picadillo de soya y no soñar. Aterrizar es lo mas sensato. Que se coman sus carros.

  • Marlene Azor, gracias por su análisis. Es la única opinion inteligente, seria, sin cólera y que responde a la realidad.

  • Aquí estoy yo en territorio de la gusanera, viendo cómo resuelvo un el problema en el que se encuentran dos de mis pacientes, uno con staphilococcus resistente a la meticilina y el otro con enteroccocus resistente a la vancomicina, y los medicamentos alternativos cuestan 150 dólares por pastilla -algo tan o más escandoloso que un Peugeot a 250 mil chavitos, que son dos pastillas diarias la dosis indicada, y la duración de tratamiento de 3 semanas -$6300, algo tan o más escandaloso que un Peugeot a 250 mil chavitos-, y el seguro no lo cubre, y el asilo donde se encuentra el paciente no lo cubre, y el paciente no tiene dinero, y a mí comiendome la conciencia, y mis compañeros de trabajo, como si nada… Y eso que a cualquiera nos puede agarrar el staphilococcus resistente a la meticilina, que no es un lujo, como un Peugeot.

  • Erasmo.

    Creo que has planetado un asunto que rebasa las líneas que le has dedicado ¿Por qué?

    Primero: ¿Existe realmente una clase media cubana?
    Segundo: En caso de que sea positiva la respuesta ¿hasta qué punto dicho segmento social ha adquirido nivel de autoconciencia clasista?

  • Yo tampoco :-D

  • Con la crítica al precio de los carros la gente no sufre represalia, pero tampoco obtiene recompensa. A mí me parece más una reacción emotiva que un cálculo costo beneficio. Figúrate que un articulista aquí en Havana Times habla de indignación.

  • Amen

  • Zarathustra, me sumo a los que se quedaron botaos; es que tu sabiduría es insondabl. Pero déjala, déjala gotear para que otros nos aprovechemos.

  • Panchi de Venice:

    Sin hipocresia, que esa es la realidad que tu quisiste vivir cuando te fuiste echando del paraiso socialista, ademas de que, decir que un Peugeot es un lujo, solo me demuestra que, lejos de vivir en el capitalismo, debes estar en una oficina de la brigadita cibernetica, luchando tu jabita de claria.

  • ¡Qué situación tan difícil! ¿te interesa compartir más de eso en Havana Times?

  • Erasmo, como siempre tus artículos son inteligentes y estimulantes, pero creo que también los señalamientos que te hacen son validos. Yo mismo tuve que “darle coco” por largo tiempo a eso de la clase media gusana . No son cuantas variantes y posibilidades encontré. Aunque el articulo es corto, como se dice en Ingles, es buena “Comida para el Pensamiento” .

  • Lo difícil es encontrar un asunto que pueda ser abordado totalmente en 300 palabras. Uno tira pinceladas, y luego interactuando o con el tiempo vamos enriqueciendolo.

    Por ejempo, te viro la pregunta ¿crees que exista REALMENTE UNA clase media en Cuba? Tú debes saber de eso mucho más que ello, porque tienes más posibilidades de comparar.
    Si quitara el REALMENTE de tu pregunta, respondería que sí, como tendencia creciente en la práctica, y como tendencia muuuuyyyy creciente en los imaginarios, robándole adeptos al TIPO Populacho-Chuzma y al TIPO (casi extinto) Revolucionario-integrado, o conviviendo en un mismo individuo como Revolucionario-Clasemedia o Chuzma-Clasemedia.

    Pongo Tipos con mayúscula porque porque me falta la palabra adecuada, que no es clase, obviamente.

    Sobre la segunda pregunta ¿hasta qué punto han adquirido consciencia de clase? Si me pides una opinión diría que la conciencia de grupo de la clase media es poca todavía, comparando con lo que he percibido en otros países del mundo y en Cuba antes del 59, poca pero pujante, y suficiente para hacerse sentir más que ningún otro grupo.
    Ahora dime tú cómo lo ves, no creas que te vas a quedar indemne.

  • “A mí me parece más una reacción emotiva que un cálculo costo beneficio.”

    Ya empezamos a coincidir; al menos parcialmente. A esto le falta un ingrediente: la esperanza en el futuro. Quien hoy tasó los autos, mañana tomará otras deciciones que sí pueden afectar a quien nunca le interesó comprarse un auto.

  • Aspirar a tener un auto es muy normal en cualquier clase social, sobre todo cuando el transporte es tan deficitario como en Cuba. Necesita un auto el burócrata más burócrata y el trabajador más mal pagado en cualquier fabrica cubana. El transporte se necesita para todo, ir al trabajo, a la escuela, hacer compras para lo que sea, pasear, buscar materiales de construcción o lo que se le ocurra hacer a cada uno.Puede haber muchas explicaciones y creo, como Marlene, que es muy complejo el asunto. Lo cierto es que es una medida que ha generalizado un desacuerdo. Reitero que puede haber muchas explicaciones. Una de ellas es que la gente se va cansando ya de tanto abuso desde el poder y esta pudiera ser una gota que esté empezando el derrame de la copa. Un pueblo puede ser engañado una parte del tiempo. Una parte del del pueblo puede ser engañada todo el tiempo. Pero todo el pueblo no puede ser engañado todo el tiempo.

  • Quizá sea insondable porque no hay mucha ;-)
    Pido disculpas por asumir que, despues de escribir aquello de las vacaciones en la Luna, todos se preguntarían lo siguiente:
    ¿Cómo me sentiría si a los 8 ó 9 años me despertara un día y encontrara a mi padre diciendo cosas a mi parecer divorciadas del sentido común? ¿Cuánta confusión me crearía? ¿No es mi padre mi principal referente? Podría sustituirse padre por madre en este caso, no estoy siendo sexista ¿Más aún, no es de ese tutor de quien depende principalmente mi formación y mi futuro? ¿De qué hablaría ese niño si su padre comenzara a tomar decisiones muy dispares a la del resto de los padres que él conoce, tenga razón o no, le hayan afectado esas decisiones o no?

  • pobrecito el amigo de tu hijo

  • ni yo… quien se fue a la luna por fin?, que le prometio el segundo hijo al tercero?, acaso el primer hijo si fue buen estudiante… ah no ya, es que el padre se compro un Peugeot para ir a la luna, ahora si entendi no?

  • Efectivamente, muy difícil, en todos los aspectos. Desde el punto de vista ético, un desastre total. Uno (bueno, no todos) se mete en eso de tratar pacientes con el fin de curarlos, o por lo menos de hacerle la vida mejor, no para estar sacando cuentas. Pues bien, en eso consiste la medicina por estos lares gusaneros: sacar cuentas. Costo y beneficio. Es toda una rama de la economía. A una persona se le asigna más o menos un precio. Tantas pastillas, tantos meses de sobrevivencia. Se ahorra tanto. Se gasta tanto. Tratamiento costo-efectivo. Luego llegan los seguros disponiendo cuál tratamiento se cubre y cuál no se cubre. Los seguros, que buscan exclusivamente el beneficio. Profit. Y que si no lo logran ven sus acciones peligrar en bolsa. Y la cabeza del CEO (presidente), del CFO, y del COO… Entonces te llega un paciente con MRSA, que estaba en un hospital. Pero lo botaron del hospital porque el hospital es más caro, o menos costo-eficiente. Allí lo trataban con el medicamento adecuado. Y lo pasan para un hospital para convalescientes, o asilo. Y entonces la cobertura cambia. Hablo del Medicare, que es el seguro del gobierno para personas ancianas y deshabilitadas. Pago fijo por persona. Pero ciertos tratamientos son más caros que lo que paga el seguro. El hospital para convelescientes no trabaja por caridad, sino para hacer dinero. La farmacia no trabaja por caridad, sino para hacer dinero. ¿Quién paga? Tira y afloja. Que si vamos a ver si encontramos otra cosa… La relación médico-paciente, uno de los argumentos que usan los republicanos y la Asociación Americana de Medicina para contaminarle el cerebro a los norteamericanos en contra de la socialización del sistema de salud, se va al carijo. El médico dice que no se puede cambiar la medicina. El farmacéutico te envía un día de tratamiento, mientras se resuelve el tira y afloja. Pero eso es pérdida para la farmacia… Bueno, para los trabajadores de la farmacia que ven su aumento de salario peligrar más y más cada vez que se da uno de estos casos, que se dan a diario, porque ya sabemos que el dueño maneja Mercedez Benz, como el médico, que cobra por ordenar Zyvox, aunque el paciente no llegue a tomarse el Zyvox. En fin, que el paciente termina volviendo para el hospital del que lo botaron por unos cuantos días… Irónicamente todo resulta en un desperdicio económico total de miles de dólares, pues las medicinas enviadas al asilo cuando el paciente ingresa se echan a la basura si no se espera su retorno en menos de tres días, ambulancia, personal… Todo, por supuesto, a costa del contribuyente… Y a costa del paciente… En un país en el que los siete herederos del fundador de Walmart tienen una fortuna equivalente al 42% de la población; un 4% acumula más del 80% de la riqueza; un país con un PIB de 15 billones de dólares; con un presupuesto militar de 600 mil millones de dólares (sin contar los 250 mil millones que cuestan las guerras pasadas mediante los servicios a los veteranos). Pues sí, un desastre.

    ¿Saben lo que hace la corporación Pfizer en este juego? El sildenafilo -Viagra-, además de servir para la impotencia, se utiliza para la hipertensión pulmonar, en cuyos estudios se descubrió que servía para aquella. Por cuestiones burocráticas, la Viagra se vende para tratar la impotencia, mientras el sildenafilo para la hipertensión pulmonar se comercializó mediante la marca Revatio, disponible en 20 mg, y recetada tres veces al día. Hoy esta es genérica, o sea barata, mientras la Viagra continúa comercializandose por marca, y cuesta una pastilla entre 15 y 25 dólares por pastilla. Los inteligentes de Pfizer van y le regalan prácticamente a los hospitales la Viagra de 25 mg para que la usen en pacientes de hipertensión pulomonar. Tres Viagras diarias. Pero cuando el paciente sale del hospital, ahí está la cosa: sale con una receta para Viagra en la mayoría de los casos, y va a la farmacia, a pagar entre 45-75 dólares por un tratamiento que con el Revatio, genérico, le debe salir en menos de 10 dólares.

    Hablemos de reificación o comodifación de los seres humanos. Sigan creyendo en cuentos de hadas y no defiendan la Revolución, como único se puede defender la Revolución, a base de pantalones y lo que hay debajo de los pantalones, contra los de afuera y los de adentro, que no saben bien lo que se les viene encima. Multiplicado, por supuesto, siendo Cuba un culito, como España, Portugal, Grecia y los demás países periféricos, a la enésima potencia.

  • Menos de 1% de la humanidad se puede comprar uno de esos Peugeots, por lo tanto, sí, es un lujo. No todo el mundo ha gozado la suerte de algunos de nacer en Cuba, sacar licenciatura gratis en una universidad cubana, y luego aprovecharla para ir a enseñar en una high school de Miami, tras haber sido admitido con derecho a residencia permanente tras solo un año de estancia en el país, permiso de trabajo inmediato, ayuda en sellos de alimentos, y Medicaid… y con el tiempo comprarse un carrito, no tan caro como el Peugeot de los 260 mil chavitos, pero algo moderadamente más barato, que te de para pagar $300 de letra todos los meses y $125 de seguro.

  • A mí me parece, Erasmo, que el asunto es verdaderamente complejo y creo además que es injusto pensar siempre que el pueblo y los trabajdores, en particular, son tontos. Que el pueblo o parte de este se sienta indignado o solo haya protestado a nivel de familia o personal o del círculo de conocidos, es, quizás, como bien dice la chica del comentario al principio, síntoma de un malestar más profundo. En definitiva se trata de un tema bien delicado en Cuba porque el transporte funciona muy mal – y de eso no le tengo que contar a nadie nada. Entonces es normal que todos deseen tener su propio medio de transporte sin pensar en otros aspectos importantes como el medio ambiente o si el precio es comparable con los medicamentos de un paciente en otra parte del mundo. Puede ser que la burocracia misma, sin darse cuenta, abra una puerta a la protesta porque mientras no había carro la gente se quejaba del transporte pero sin más trascendencia, y ahora que se venden los carros la gente habla de los precios. Aunque no justificable, es entendible,.
    Para mí el problema radica en el transporte público que siempre ha funcionada pésimo. Si tuviéramos un transporte público que funcionase de manera óptima, que además cumpliera con determinados patrones como respeto al medioambiente, eficiencia, calidad, etc., entonces se podría poner un contrapeso a las aspiraciones individuales de ciertas personas o de ciertos grupos sociales – y lo digo así porque yo sí no creo que en Cuba se pueda hablar de la existencia de una clase media realmente y mucho menos con conciencia, aunque cada vez se ve más cantidad de personas con determinadas posibilidades de adquisición de determinados productos y entre ellos hay que contar a la burocracia pero que todavía no se muestra como una clase media con conciencia en el estilo clásico.
    Lo que sí me llama la atención es que el tema se discuta tanto desde una perspectiva tan llana en páginas como estas, la llamada disidencia y entre los exponentes del librepensamiento no oficialista. Excepto este artículo he visto solo textos que se mantienen en el nivel de lo anecdótico y recuerdan el característico veneno anticastrista pero reaccionario acostumbrado y muy alejado de las cuestiones realmente necesarias que en verdad deben preocupar a la población cubana, como tú mismo bien has escrito. Hasta en estas mismas páginas, un texto de Fernando R. me llamó particularmente la atención porque, después de citar a renombrados opositores a la oficialidad, alguno incluso muy de derecha, nos propone hacer una clara división entre los que, según su propio criterio, tienen el derecho a tener un carro y el resto, del que el autor supone, no solo que no se lo merece, sino que además seríamos muy tontos para aceptar con esta medida, de unos sí otros no, el status quo que se va imponiendo de que las diferencias son naturales y lo tontos, menos habilidosos, menos capacitados llevamos las de perder. Este tipo de cinismo socialdarwinista es el que va a imponer una clase media que dominará al resto. Por eso es escandaloso que aquellos que no solo se autodenominan los intelectuales o pensadores antioficialistas y alternativos sino que además aquellos que tienen los medios para difundir ideas realmente alternativas repitan hasta el cansancio de repetir pero no de haber analizado ninguna de las palabras escuchadas, leídas, etc., ideas tan peligrosas como la de este señor R. u otros.
    Si los carros no son asequibles para la mayoría de los cubanos es una mentira más de la burocrasia, por el otro lado y peor aún es el intento de ir implantando las diferencias sociales a conciencia. Esto es lo que hay que criticar y no el precio de los carros, que estamos asistiendo a la implatación de relaciones sociales en las que los trabajadores y el pueblo, dormidos entre las mentiras oficialistas de las mejoras económicas y sociales para todos y los cantos de sirena de los no oficialistas de que se puede mejorar la vida de un pueblo vendiéndoles carros a unos cuantos a precios más baratos, van a salir perdiendo.

  • Erasmo:

    Queda claro que en 300 palabras no puedes hacer mucho más que plantear someramente el tema. Ahora, partamos de que mis dudas entán dadas en gran medida por el largo tiempo de ausencia de Cuba. Por eso no me siento capacitado a dar respuesta conclusiva alguna, y por igual motivo le lancé la interrogante a Haroldo Dilla cuando trajo a colación la supuesta clase media cubana relacionada con la venta liberada de automóviles. Ahora lo hago contigo.

    En los pocos días que estuve en Cuba hace un par de meses entré en contacto con personas que han elevado su estatus social a la sombra de las actuales reformas, sea porque les va muy bien en sus negocios por cuenta propia, sea porque reciben remesas regulares de EEUU y otros lugares, sea porque han logrado posicionarse en el estamento paraestatal, en el turismo u otras actividades similares. Todo este sector se está diferenciando de modo creciente del cubano que depende casi en exclusiva de su sueldo pagado por el Estado, o de una creciente masa de menesterosos, entre los cuales van siendo presencia cada vez más destacada los jubilados, que apenas tienen lo justo para vivir; o lo desplazados de antiguas plazas laborales hoy obsoletas.

    Lo que aún no noto es la división entre la supuesta clase media y la alta, la cual debería estar definida para poder establecer la existencia de la primera, entiendo yo. Para dejarlo más claro: para que haya clase media, deberían existir una clase alta y otra baja, ¿o no? Por su parte, es evidente que la clase pobre o más desposeída se está haciendo cada vez más visible.

    Lo que percibí en 2013 fue más bien una polarización en aumento entre “tenemos” y “no tenemos”.

  • Gracias por participar. No he leido todo el comentario, solo por arriba.

    No he dicho que el pueblo o los trabajadores sean tontos. Tener una visión una idea de sí mismo un tanto alejada de la realidad es muy común y no es síntoma de tontería, aunque sí de alienación. Marx ¿o Engels? decía que ciertas relaciones de producción, relaciones clasistas, motivaban una conciencia invertida de la realidad, donde lo espiritual estaba primero que lo material etc. Eso no quiere decir que alguien fuese tonto.
    Creo que aquí podemos aplicar algo parecido: unas relaciones de producción clasistas, donde el poder está en manos de un mega Estado y una clase media está en asenso, desplazan el sentido de identidad lejos de la realidad.
    Por lo demás estoy de acuerdo con mucho de lo que usted dice. Cuando me desconecte lo leo con más calma.

  • Gracias Tony, me halagas. No pierdas tiempo dándole coco a mis disparates, mejor pregúntame directamente o en un comentario. Si no entiendes algo de lo que digo, lo más probable es que no me haya expresado con claridad, coom en este post.
    Respecto al señalamiento de Marlene Azor, no creo que ella tenga razón.

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