De cómo acabar con el fraude en las escuelas cubanas

Erasmo Calzadilla

En temporada de exámenes abundan por el piso chivos como estos.
En temporada de exámenes abundan por el piso chivos como estos.

HAVANA TIMES — La noticia con más pegada durante este mayo que termina no fue, paradójicamente, la captura en territorio nacional de una supuesta red terrorista con intenciones macabras; la gente está como saturada e incrédula de todas esas historias truculentas de espías, agentes y terroristas. El suceso que más sonó este mes fue el fraude ocurrido durante las pruebas de ingreso a la educación superior.

Los medios oficiales lo han tratado como un acontecimiento puntual, desviando la atención del análisis profundo, sistémico e histórico del problema.

Un profesor universitario entrevistado por Cuba Dice (proyecto periodístico que aborda temas sociales de manera harto superficial) enumeró un conjunto de valores cuya ausencia abre las puertas al fraude y sobre los que habrá que trabajar más intensamente a partir del curso próximo (pobres muchachos), otros interpelados en la calle pidieron que el hecho no quede impune, que se controle más a los profesores y cosas como esas.

Lo que nunca admitirá Cuba Dice ni ningún noticiario dirigido por el PCC es que el fraude se ha convertido en parte indispensable del sistema, orgánicamente integrado a la sociedad actual.

La misma corrupción que permea a casi todas las instituciones estatales se expresa en las escuelas como fraude. La distancia creciente entre los informes oficiales y la realidad se resuelve en las escuelas por medio del fraude.

Fui profesor en un preuniversitario y lo viví en carne propia. La mayoría de mis estudiantes no dominaba los contenidos de primaria: sumar fracciones y números negativos, despejar variables… Pero como los exámenes se confeccionan para el nivel medio superior, la brecha entre la realidad y los papeles se soluciona ¿cómo? vía fraude.

¿Y por qué los estudiantes tienen tan bajo nivel? -sigamos profundizando. Pues porque la mayoría de los docentes, cansados de que los ninguneen, han abandonado la educación. ¿Y por qué les pagan tan mal? ¿Por qué hasta los mismos alumnos se sienten con derecho a maltratarlos? Porque el sistema completo yace patas arriba.

Pero sigamos con el fraude. Un conjunto de poderosas razones desestimula al maestro que pretende luchar o no participar del acto corrupto. De entrada sus estudiantes no pasarían de grado y se afectaría su evaluación, además se echaría de enemigo a los estudiantes y sus parientes, a los colegas no tan honestos y puede que hasta la directiva de la escuela se confabule contra él. Pero eso no es todo, tendrá que ponerse a inventar cómo cubrir los gastos del mes.

Yo mismo abandoné el curso a mitad de camino por no verme en la penosa situación de suspender a la mayoría de mis estudiantes y para evitar que me dieran dos puñaladas en la puerta de la escuela como parte de una muerte anunciada, porque amenazas no faltaron. Que te pones de Don Quijote a meter un palo entre los rayos y te ganas lo que no está pa’ ti.

Si seguimos las hebras que conllevan al fraude sistémico una de ellas nos llevará hasta los dirigentes del gobierno y del partido. Ellos prefieren ocultar las grietas en la pared del sistema educativo por el costo político tan alto que su reconocimiento implicaría, y lo consiguen gracias a la amable colaboración de los periodistas.

Luego, como el problema “no existe”, ni se debate al respecto ni se ensayan soluciones. Y quizás sea mejor así porque a los del Partido se le puede ocurrir una campaña de charlas sobre José Martí y cosas por el estilo.

En resumen, que la situación es mucho más profunda de lo que el PCC pretende hacernos creer a través de sus medios de comunicación. La solución, obviamente, no pasa por imponer un castigo ejemplar a los culpables, mucho menos por obligar a los muchachos a aprenderse una lista de valores.

¿Cuál podría ser entonces?

Se me ocurren algunas en el marco del paradigma educativo actual:
• Subirle el salario a los profesores de acuerdo a la complejísima labor que realizan y a la alta responsabilidad social que detentan.
• Respeto a su oficio que no es el de domador de fieras ni el de simple vocero de un conocimiento.
• Respeto a su tiempo, no mantenerlo en la escuela porque un reglamento disciplinario así lo exige.
• Respeto a sus ideas, no forzarlo a ser promotor de una ideología que no comparte.
• Respeto a su persona, no obligarlo a soportar en el aula a estudiantes agresivos o boicoteadores de su clase.
• Mayor autonomía para las escuelas; que profesores, padres y estudiantes participen en la toma de decisiones.
• Permitir la apertura de instituciones escolares que respeten un reglamento mínimo pero estén basadas en otros principios educativos.

Eso es pensando rápido, porque si me demoro un poquito comienzan a asaltarme recomendaciones de un tipo radicalmente diferente.

Desperdigadas por el mundo existen en la actualidad numerosas escuelas de inspiración libertaria*. Sus profesores no tienen que preocuparse por el fraude porque no aplican exámenes ni obligan a los estudiantes a competir por un número en el escalafón.

Quienes estudian de acuerdo a estos ideales aprenden lo que les gusta al ritmo que les place porque aprender puede y debería ser un gustazo. Lo digo para que entendamos hasta qué punto el fraude es consustancial al paradigma educativo que el sentido común y la burocracia aceptan como único y adecuado.
—–
* La pedagogía libertaria surgió al calor de la Comuna de París. Este 28 de mayo se cumple otro aniversario de la masacre que acabó con el gobierno del pueblo y los trabajadores.

Erasmo Calzadilla

Erasmo Calzadilla: Qué difícil me resulta introducirme en público; lo he intentado muchas veces pero no me sale. Soy más menos lo que aparento en mis post, añada algunas cualidades impresentables y revuelva; con eso debería bastar para un primer acercamiento. Si quiere profundizar un poco más pídame una cita y espere respuesta.

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24 thoughts on “De cómo acabar con el fraude en las escuelas cubanas

  • Excelente este artículo sobre el tema del fraude, que no es noticia excepto quizás porque este año vimos las fotos de los exámenes que circulaban en celulares, pero que muchos años atrás todos supimos de filtraciones de pruebas.

    El maestro debe se bien pagado para que la profesión sea atractiva, para que se nutra de los mejores estudiantes. Ahí estamos de acuerdo. Incluso, estaría de acuerdo con el salario propuesto por Fidel Castro en La Historia me absolverá, pero convertido a los números actuales, incorporando el cambio actual de pesos por dólares y la depreciación del dólar. Serían unos cuantos miles de pesos, pero me parece bien.

    Yo propondría, además, que no un Ministerio de Educación Superior, sino cada Centro de Estudios Superiores haciendo uso de la vieja conquista de la Autonomía Universitaria sea el que elabore sus propios exámenes en función del nivel que espera de los estudiantes y de su oferta educativa. No puede ser igual el nivel de Matemática exigido para estudiar Filosofía que para Ingeniería Civil. Una carrera de lenguas debería poder exigir una prueba de dicción. En la misma sintonía, cada centro universitario debería poder transformar y modificar su oferta educativa, en función de hacerla atractiva para los estudiantes, entiéndase, que se aprecie lucrativa para el mercado laboral.

    Otra sugerencia es que las pruebas no sean el papel escrito. La UCI ha graduado ya a un par de miles, verdad? Ok, sería cosa de una prueba auto administrada por computadora conectada a un servidor remoto, o por la intranet ( eso lo tendrían que resolver los ingenieros en informática). El estudiante entraría con su número de carnet de identidad y una contraseña, en un ambiente controlado como puede ser la biblioteca de la universidad a donde quiere entrar. El sistema tendría una base de datos de preguntas, de 100, 200 1000 preguntas donde le saldrían aleatoriamente 5-10 preguntas. Ningún estudiante hace la misma batería, no hay baterías. Y nadie sabe qué le va a salir a cada cual. El propio sistema le asignaría la calificación correspondiente y la guardaría en la base de datos de notas. No hay profesores calificando. Todo transparente, parejo, justo.

  • “Quienes estudian de acuerdo a estos ideales aprenden lo que les gusta al ritmo que les place porque aprender puede y debería ser un gustazo.”

    Sin negar que , cuando se aprende a gusto, se aprende mejor o, por lo menos mas rapido, lo anteriormente dicho es pura pedagogia de potrero.

  • Erasmo, en lineas generales concuerdo contigo….
    Tus recomendaciones son en general muy aceptables, pero no por eso vas a ser escuchado porque al igual que la mayoria de los periodistas, que en “Cuba Dice” (como monólogo recitado por un sordo), dicen una cosa y personalmente piensan otra y además, sólo presentan a los entrevistados que no discrepan, sino apoyan la linea editorial -que no la del periodista, esta última no es pública y por tanto, el periodista en muchos casos actúa de forma hipócrita y simuladora-, siempre dejan el análisis en la superficie de los problemas y sus causas, para crear la impresión de un periodismo crítico y transformador de la realidad, cuando en verdad, no hay ninguna crítica y menos, afán transformador, porque esas acciones sólo son privilegio de los “elegidos”, los demás, no cuentan, son parte del paisaje que pintan…
    Sin embargo, de tus propuestas, que considero importantes, la relativa al respeto a las ideas (vale decir, la ideología) del maestro, no forzándolo a ser promotor de una ideología que no comparte, esa es una regla universal en cualquier régimen y en cualquier tiempo (recordar a Mc Carthy y su Comité de Actividades Antiamericanas, o la política del Furher, o Pinochet, o Franco, o las instituciones escolares (y escolásticas) católicas o protestantes, etc) han sido la práctica habitual del Estado como representante de la clase dominante y su ideología como la dominante y “legal” en la sociedad. Pretender otra cosa, es permitir hasta el discurso fascista, o de discriminación por cualquier razón, o sembrar los antivalores opuestos a la humanidad de bien, o al ideal humano. No, eso no fue lo que nuestro José Martí nos enseñó. Él creía en el mejoramiento humano y en la sagrada labor del MAESTRO con mayúsculas y entre otros pensadores de nuestro suelo y nuestr historia, nos enseñaron que “Educar no es dar instrucción para vivir, sino templar el alma para la vida” o también que “Enseñar puede cualquiera, educar sólo puede quien sea un evangelio vivo”.
    El maestro puede tener sus propias ideas, pero eso no le da el derecho de inculcarlas a título personal y hasta subversivo contra el orden social establecido por las leyes, en el sistema de educación del país y en el nuestro, si bien no todo resulta como se quiere, al menos, los ideales SÍ tienen validez hasta universal y a eso no podemos renunciar.
    Por otra parte, el respeto a su oficio de maestro que tu reclamas, se queda muy por debajo de lo que debe ser el verdadero respeto a ese sagrado oficio. Al maestro, si es un verdadero maestro, en cualquier circunstancia hay que oirlo y reconocer la autoridad que realmente tienen y deben tener, que no sea como tú dices, ninguneado. El filme Conducta habla muy bien de las contradicciones del sistema de educación cubana y las presiones que reciben los maestros cuando son consecuentes en su actuar con lo que profesan y no se pliegan a los “mandantes” y sus intereses. Por eso, porque deben ser un evangelio vivo, es por lo que hay que respetarlo y reconocerlo por la sociedad, no sólo por el esfuerzo que se necesita para lidiar con muchachos indisciplinados, agresivos o boicoteadores y hasta con sus padres negligentes, sobornadores o amenazadores como lo muestra el valioso filme referido, sino porque son sembradores de los valores que pueden hacer mejor al ser humano. Todos recordamos a nuestros maestros que para nosotros tuvieron entrega y desinterés y en nuestros sentimientos tiene un lugar privilegiado como nuestros segundos padres o madres y no es por gusto. Por eso, el reconocimiento al maestro hay que hacerlo no sólo moralmente, que ya eso de por sí, cuando es verdadero y no propagandístico, ya es bastante, sino económicamente, para que pueda realizar su sagrada misión con honradez y honestidad y no deshacer con sus acciones lo que pretende lograr con sus prédicas. Por eso, mientras no se vaya a la raiz de estos problemas, seguirán los fraudes académicos y escolares enseñoreándose en nuestra sociedad.

  • En cuanto a las recomendaxciones que hace, estoy de acuerdo 100 %. Yo propondria una mas.

    – Que los padres asuman las responsabilidad que les toca en el proceso de aprtendizaje de su hijos; y que respondan po ello ante la ley, como se estila aqui. Si tu hijo no va a la escuela, por ejemplo; y no tiene la adecuada justidficacion y los padres lo consienten, pueden hasta ir a juicio. Incluso se les puede retirar la licencia de conduccion.

  • Ah! se me olvidaba…

    Cuando afirmas “… la alta responsabilidad social que detentan.” refiriéndote a los maestros, empleas inadecuadamente el verbo detentar porque según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, DRAE, ese verbo significa:

    Del lat. detentāre, retener). tr. 1. Retener y ejercer ilegítimamente algún poder o cargo público. || 2. Der. Dicho de una persona: Retener lo que manifiestamente no le pertenece
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    Lo que no es lo mismo que ejercer legítimamente, que me parece que es lo que quieres decir….

  • Lo otro que merece especial atención es la diversidad educativa, que sólo se logra permitiendo la entrada de otras escuelas en un sistema mixto público y privado.

    Ahí podrían entrar las libertarias, las Montessori, las religiosas y la madre de los tomates siempre que se ajusten a un pensum básico regulado por el ministerio de educación.

    Ventajas: Se mantiene la obligación del Estado de dar cobertura educativa gratis a todos. PERO, se le alivia de la carga presupuestaria de educar a todos los niños, pues una parte de padres y otras instituciones asumirían ese costo. Se genera empleo pues cada escuela requiere personal docente, administrativo y de servicios. Se genera competitividad, entre escuelas, entre profesores para acceder a mejores posiciones. Se motiva al docente a superarse, mejor calificado podrá optar por trabajar en escuelas que paguen mejor. Saldrían estudiantes con diferentes orientaciones y enfoques filosóficos y académicos. El mejoramiento de uno actúa como un resorte motivador del mejoramiento de otros, y esto funciona como un patrón de referencia para que los usuarios de la educación pública exijan mejoramiento en lo que reciben.

    Desventajas: siempre habrá quien diga que es injusto porque no todos los padres pueden pagar, y que es mejor condenar a todos a la porquería gratis que mal pueda dar el Estado.

  • Cuando yo estudie en la secundaria por los 70s , los promedios de pase de curso de mi escuela rondaba entre el 85% y el 87%, recuerdo que en aquella epoca ponian en el Granma el listado de todas las escuelas y el porcentaje del pase de grado , habian mas de 50 secundarias con 100% de aprovados, generalmente eran escuelas del interior del pais, a mi siempre me intrigo eso , cuando entre en la Academia Naval , alli iban jovenes de todo el pais y fue donde me entere que en esas escuelas , los profesores le soplaban los examenes a los alumnos para ganar la maldita emulacion. Chequeen los periodicos de la epoca y veran donde empezo todo. Es imposible que el 100% de los alumnos pasen de gado; sin contar que eso no lo ayuda en nada, el que es bruto en 5 grado , es rebruto en 7 grado.

  • Tienes razón, le voy a pedir al editor que cambie detentan por “que cargan sobre sus hombros”. Gracias.

  • Muy buen articulo escrito por alguien que ha estado dentro del sistema de educacion en Cuba. Mis respetos.

    Yo agregaria que la educacion hay que verla como una inversion de toda la sociedad, como mismo se invierte en un proyecto economico concreto. Los frutos se recogen a largo plazo pero como cualquier inversion necesita financiamiento inicial y planificar los resultados a cosecharse. En Cuba se ha invertido mucho en educacion pero sin tener en cuenta los beneficios a esperar. Por ejemplo no es serio invertir 50 mil usd en la formacion de un profesional y despues pagarle 20 usd mensual para que aporte sus conocimientos al desarrollo del pais. Es un pesimo negocio economico y social.

    Los paises que han salido del subdesarrollo han invertido fuertemente en educacion, pero tambien han dado oportunidades para que esa poblacion formada pueda realizar los conocimientos adquiridos estimulandolos salarialmente y sin limitaciones en su creatividad.

  • En la próxima Asamblea General de las Naciones Unidas que, por favor, Bruno Rodríguez en lugar de darnos su habitual perorata contra el Bloqueo, y los 20 mil muertos de Batista, inicie los trámites de anexión a Finlandia.

    En un país dominado por la escasez la gente está dispuesta a hacer lo que sea pa’ coger un poquito de lo que hay. Los cubanos no se han comido los unos a los otros gracias a Chavez y a las remesas.

    O sacan a la banda de incompetentes y demás que está en el poder, y llevan el país por otro rumbo, o nada jamás cambiará. Lecciones de la experiencia.

  • Con el tiempo se le refuerza lo de bruto.

  • En esencia han propiciado que la educación forme en función de sus actividades económicas.

    Por ejemplo, para que hacían falta en Cuba un ejército de trabajadores sociales, como si hubieran tantos programas sociales. O mandar gente a estudiar como construir un Metro si no teníamos una empresa dedicada a construir metros por todo el mundo.

    Pienso que la libre empresa va marcando la demanda de carreras de todo nivel y de especialidades a cubrir. Una educación ágil la capta y la canaliza porque es su razón de ser.

    Ahora mismo hicieron el puerto de Mariel y ¿quién va a trabajar allí? Un puerto demanda soldadores de diferentes clases, estibadores, ok eso lo hace cualquiera. Pero también demanda logísticos, navales, marineros, prácticos, operadores y mecánicos de equipos pesados, gente bilingüe, etc.

    La economía va por un lado (es un decir) y la educación sigue con el librito viejo.

  • ¿Pedagogía de potrero?
    Creo que has dado en el clavo, pero solo a medias. Sí asocias potrero a lo animal en el sentido de espontáneo, orgánico y natural, me parece que sí, que deberíamos regresar a una pedagogía que recupere ese espíritu.
    Pero si asocias potrero a un sitio cercado; ahí sí que te alejas.

  • Excelente idea gusa. Pense en algo similar. Teniendo sufucientes preguntas es imposible memorisarlas todas las respuestas es mas facil realmente aprender.
    Otra cosa seria hacer una parte del examen oral en un examen oral uno se da cuenta de inmediato quien sabe y quien no.

  • Gusa, recuerda que la porqueria “gratis” en realidad no lo es. No es gratis.
    No sigamos repitiendo inconcientemente los mitos.

  • El fraude escolar es consustancial al sistema cubano pues todo él se sustenta en la mentira y la doblez. Yo hice el pre a mediados de los 80 y ya entonces sucedía que el día antes misteriosamente aparecía en manos de algún estudiante lo que iba a salir y se regaba a velocidad supersónica. Esto sucedía en lo que se consideraba en esa época, y aún hoy supongo, el segundo mejor centro del país. Lo peor, en esa época de “bonanza” (jajaja), socialismo ortodoxo y moneda única no era el dinero lo que “resolvía” sino otro tipo de favores, que en el caso que nos ocupa eran sexuales (alumnas con maestros)

    ¡Gracias Fidel!

  • Las pruebas de ingreso empezaron más o menos como en el 86.

    Dudo mucho que un profesor pudiera obtenerla con tiempo suficiente para intercambiarla por favores sexuales.

    Eso salió de bien arriba

  • Tienes razón. Es la porquería pagada entre todos, a precio de oro.

  • No me refiero a las pruebas de ingreso sino a las generalidades (exámenes semestrales), que se elaboraban en el centro (la Lenin). Y lo que cuento me consta, no hablo de oídas.

    ¡Gracias Fidel!

  • Ah esas sí.

    Pero la de ingreso sólo pudo salir del mero mero.

  • Sencillo con volver a instaurar las cosas como estaban que era lo normal por lo menos, comenzarian a resolver el problema deben devolver el poder a la familia en la educacion de los hijos, a la escuela se va a aprender primero a leer y escribir y no a recibir doctrinas que de nada han servido, el maestro es un funcionario al que hay que respetar y no un domador de malcriados en mis tiempos, dios me ampare por hacer “travesuras” pues hasta mis padres le daban la razon al maestro/tra por el castigo que me sonaban que podia ser desde repetir “lineas” o tablas de matematicas (por suerte esto ayuda) hoy en dia los padres le van “pa`rriba” con aquello de que “.. a mi niño no hay quien lo toque….”

  • Erasmo:

    Todas tus propuestas me parecen acertadas, pero una vez más llegamos a la parte de ¿quién le pone el cascabel…?

  • Erasmo, muy bueno. Soy profesor oficialmente desde los 15 años. Combiné estudio y trabajo. Todo comenzó, como bien recuetrda Luis, en aquellos setenta con la emulación entra las escuelas en el campo. Entonces éramos altruistas, motivados, equivocadamente a veces, por la ideología, no había fraude debido a sobornos económicos.
    Se debe rescatar el respeto a los maestros. Hay fraude, extendido, también educadores honestos, clamando por algo mejor, atrincherados, como la maestra dell filme Conducta.
    El centralismo exagerado, absurdo, prueba la desconfianza en los claustros, los de muy arriba no creen en sus profesores. El secretismo es tratar de tapar la cloaca, de atajar la peste, sin higienizar el local.
    Por lo demás, se deben rescatar los tribunales docentes, con los mejores profesores, capaces de dictaminar si sus educandos tienen o no las facultades para ingresar a la universidad. Estos tribunales serán elegidos en asambleas de los trabajadores, luego se crearían jurados aleatorios, sin vínculos directos con sus alumnos de base. Total transparencia y empoderamiento para los trabajadores.
    No coincido contigo en lo ideológico porque no existe sistema educacional alguno, en país alguno, fuera de la ideología. Las escuelas, los progreamas, necesariamente son preconcebidos y por tanto, tienen ideas previas que los guían. Tal vez lo cubano sea el extremo de la ideologízación, sin oportunidad al necesario debate, algo si presente en otras bpartes del mundo, más tolerantes, abiertas a ideas de todo tipo, como los antiguos griegos.
    Por lo demás, contento, aunque te me adelantaste.
    Saludos de un colega y amigo,
    Vicente.
    NOTA: Vale la pena recordar que en los años 40-50 del pasado siglo, tuvimos una generación de excelentes maestrios, pobres, con bajos salarios, muy poco estimados por los gobiernos de turno, sin embargo, sembraron el civismo capaz de derrotar a la dictadura batistiana, no eran corrompidos, no vendías sus exámenes. Esa es la historia y no debe ser olvidada.

  • Supongo que nosotros mismos tendremos que ponerselo, llenarnos de ánimo y acabar de ponérselo.

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