Oscuridad y silencio para Helen Keller ¿también en Cuba?

Dmitri Prieto

Hellen Keller. Foto: wikipedia.org

HAVANA TIMES — Helen Keller (EEUU, 27 de junio 1880 –1 de junio 1968) es poco conocida en Cuba. Esta gran intelectual y activista sordo-ciega recibió, sin embargo, un discreto homenaje televisivo en fecha reciente, por el aniversario de su natalicio.

Las organizaciones que en Cuba agrupan a discapacitad@s (ANCI, ANSOC, ACLIFIM) están trabajando por una mayor visibilidad de sus problemáticas, junto con contrapartes extranjeras y medios informativos nacionales.

Me alegró ver la breve reseña sobre Keller: una de las personalidades norteamericanas que empiezan a ser conocidas en nuestro país, en relación con la lucha por alguna causa justa.

Helen Keller nació en Alabama y perdió la visión y la audición cuando aún no había cumplido los dos años. Pero tuvo suerte, y perseverancia: una valiente y avezada maestra (Anne Sullivan) la enseñó a comunicarse usando los dedos, y así Keller tuvo acceso a la lectura, ya fuera en Braille o mediante intérprete.

En 1904, Helen se graduó «Con Honores» de la Universidad de Radcliffe, siendo la primera persona sordociega en obtener un título universitario. Se convirtió en personalidad célebre, y lidereó nacionalmente la causa de quienes tienen alguna discapacidad.

Pero hubo algo que oscureció mi alegría de ver a Helen Keller en nuestra tv: en la información que brindaron faltaba una dimensión importante de su vida.

Porque se refirieron a ella sólo como intelectual, activista y líder de las gentes que viven con discapacidad, y no se mencionó el hecho de que ella estuvo vinculada con otras causas igualmente radicales, como el anticapitalismo, el feminismo y el antirracismo.

En 1964, el presidente Johnson condecoró a Helen Keller con la Medalla Presidencial de la Libertad, pero a pesar de eso, ella nunca fue parte del establishment.

LUCHADORA SIN CUARTEL CONTRA EL CAPITALISMO

Lectora ávida (vía intérprete) de libros de economía marxistas y anarco-sindicalistas, Keller escribió cuando EEUU estaba a punto de entrar en la Primera Guerra Mundial: “Me incorporé a la lucha contra el sistema económico en que vivimos. Ha de ser una lucha hasta el fin, y no pido cuartel”.

Consciente de los privilegios de clase que –siendo discapacitada- permitieron su ascenso social, Keller investigó los vínculos entre explotación económica y discapacidad. Militó en el combativo sindicato IWW (Industrial Workers of the World), que –cercano al anarquismo- desdeñaba la política de partidos y generó cientos de huelgas a principios de siglo.

A sus adversarios, que lastimosamente pretendieron clonar la imagen de una pobre mujer sordociega “explotada” pérfidamente por los “rojos”, Helen les preguntaba con fuerte ironía si ellos sabían realmente en carne propia lo que significaba el vocablo “explotación”.

Keller y sus fellow workers no lograron la revolución, pero fue la presión del proletariado militante, y no la buena voluntad de las clases en el poder, la que propició en su momento(junto con la Gran Depresión) el llamado New Deal de Roosevelt.

Antimilitarista, antirracista, antitotalitaria, colaboradora de la NAACP y la ACLU, defensora epistolar (1955) de la sindicalista Elizabeth Gurley Flynn represaliada por la justicia estatal norteamericana, Helen Keller mantuvo su militancia aún en la época del macartismo, hecho que espantó a muchos donantes conservadores de la Fundación Americana del Ciego (AFB).

La explícita apertura de mi país a mecanismos y estructuras de tipo capitalista propicia que el silencio y la oscuridad pretendan censurar el entusiasmo comprometido de esa excepcional luchadora contra todo tipo de explotación oculta bajo falsos modelos de “justicia”.

Pero estoy seguro que Helen Keller vencerá al silencio y a la oscuridad – una vez más.

Dimitri Prieto-Samsonov

Dmitri Prieto-Samsonov: Me defino por mi origen indistintamente como cubano-ruso o ruso-cubano. Nací en Moscú, en 1972, de madre rusa y padre cubano; viví en la URSS hasta los 13 años, aunque ya conocía Cuba, pues veníamos casi todos los años de vacaciones. Habito en un quinto piso de un edificio multifamiliar, en Santa Cruz del Norte, cerca del mar. Estudié Bioquímica, Derecho (ambas en La Habana) y Antropología (en Londres). He escrito sobre biología molecular, filosofía y anarquismo, aunque me gusta más leer que escribir. Imparto clases en la Universidad Agraria de La Habana. Creo en Dios y en la posibilidad de una sociedad donde seamos libres. Junto con otra gente, en eso estamos: deshaciendo muros y rutinas.

3 thoughts on “Oscuridad y silencio para Helen Keller ¿también en Cuba?

  • El homenaje lo hacemos nosotros Dmitri. Un abrazo

  • usted esta tan equivocado al dar la dimension de la lucha social en los eeuu como si fuera fidel castro….ella es una luchadora mas,que ayuda al sistema liberal,democratico,capitalista a irse adaptando a la realidad,pero nada de revolucion proletaria,ni dictadura del proletariado,nada de eso.En los eeuu todo el mundo aporta,desde el tea party hasta los luchadores sindicales ,los comunistas y los homeless,no pueden ustedes «hombres nuevos» dejar la vision ideologica de la vida y ser mas pragmaticos,mas reales???

  • Solo basta con leer solo un poquito de lo que escribió la misma Hellen para saber que no es cierto lo que dices Darío.

Comentarios cerrados.