¿Qué celebramos?
Alfredo Fernández Rodríguez
El presente año 2010 ha sido recibido en Latinoamérica como el de los festejos por el Bicentenario de la Independencia de los Países de América del Sur. Un breve repaso de estos doscientos años da sentido a la pregunta que titula mi artículo: ¿Qué celebramos?
Tiempo ha tenido Latinoamérica para enseñarle al mundo algo mejor en materia de política que lo hoy mostrado. Tierra esta fértil de dictadores, demagogos y corruptos, con partidos eternizados en el poder, como el mexicano PRI, por solo citar al de mayor tiempo.
Con la adopción del sistema neoliberal en buena parte del continente durante los noventas del siglo XX se terminó por hacer convivir en la región a los hombres más ricos del mundo junto a los más pobres.
Región que ha visto a sus políticos alcanzar un protagonismo en los medios impensable en cualquier otra parte del mundo, preocupándose más por el índice de popularidad que por la calidad de su gestión ante el pueblo, región también donde un presidente puede convertirse en un especialista en temas internacionales, olvidándose por completo de los destinos de su país.
Por último la celebración se concreta con la inclusión del sintagma “Socialismo en el siglo XXI” en la política latinoamericana. Sintagma, que yo, que tengo 34 años y nunca he salido de Cuba, aún no entiendo.
En Latinoamérica el respeto a las instituciones y la eliminación del caudillismo son en política nuestras asignaturas pendientes. Sólo así, la corrupción podrá ceder el paso a verdaderos estados de derechos, donde el respeto al otro sea la máxima en los países de la región.
Es esta una “celebración” de una libertad que todavía no llega a los latinoamericanos y aunque no quiero ser aguafiestas, la pregunta ¿Qué celebramos?
Se me desliza cada vez que escucho hablar de la conmemoración.