Un vistazo gringo a un rodeo cubano

Fotorreportaje por Bill y Linda Klipp

HAVANA TIMES — Después de pagar 10 pesos cubanos (unos 35 centavos en dólares americanos) nadie parecía fijarse en nosotros, tres gringos, mientras pasábamos debajo de la entrada arqueada que da al recinto ferial de Rancho Boyeros de La Habana. Fue un día de Marzo de calor sofocante y sol ardiente, fecha de una larga semana de la 18 edición del Rodeo y la Feria Agrícola Internacional FIAGROP 2015.

Nuestro objetivo era ver de primera mano y fotografiar un auténtico rodeo cubano. Cargados con un montón de tarjetas de memoria, nuestro buen amigo Eduardo García, fotógrafo callejero cubano reconocido internacionalmente, nos condujo por el abarrotado pasillo principal hacia la Feria. No pasó mucho tiempo para que descubriéramos que nosotros, los tres amigos, éramos los únicos gringos entre los muchos vaqueros cubanos y las familias de Boyeros reunidas allí para presenciar las festividades anuales de FIAGROP.

Como muchas cosas en Cuba la escena era como retroceder en el tiempo, esta vez, sin embargo, nos encontramos con el equivalente cubano de un típico rodeo del medio oeste estadounidense en una feria estatal.

Situado a unos 20 kilómetros de La Habana Vieja, el recinto ferial de Rancho Boyeros con su rodeo al aire libre y sus tribunas, es un extenso complejo lleno de cientos de puestos de venta de ganado, caballos y cerdos.

Dispersos por todo los alrededores se encuentran vendedores de alimentos, así como personas ofertando sombreros, sillas de montar, cuerdas y otros equipos ecuestres. A todo lo largo de la instalación se ven familias dirigiendo a sus niños que llevan globos en las manos, a menudo se detienen para observar las aves, ratones, jerbos, hámsteres, pollos, conejos y otros animales pequeños disponibles para la venta.

Como con todas las cosas en Cuba había, por supuesto, cantidad de cerveza y vendedores de ron y varios locales de música en vivo. Además del rodeo y de los eventos familiares, tales como concursos de vacas de ordeño, se agrega un elemento industrial a la Feria, pues unas 100 empresas nacionales y extranjeras exhiben productos y tecnologías necesarias para la industria cubana de alimentos agrícolas.

Evidentemente lo más destacado es el rodeo internacional y las competencias de equitación. Con reminiscencias de tiempos más simples del pasado nos sorprendió que tuvimos acceso sin trabas a casi todas las áreas mientras caminábamos a través de los puestos de animales y sorteábamos nuestro camino entre los vaqueros a caballo mientras acorralaban los terneros, novillos y toros en la rampas. En un momento, Eduardo fue incluso capaz de colarse en el escenario durante un evento de cuerda para conseguir algunos imágenes de cerca.

El rodeo de la tarde comenzó con un desfile de banderas seguido por el Himno Nacional. Lo siguiente fue una buena carrera de barriles, seguido de dos hermanos jóvenes haciendo algún loco truco de cabalgadura. También hubo varias competencias por equipos y individual y completó con los payasos.

El acontecimiento más impresionante fueron dos vaqueros a caballo que perseguían a un novillo de la tolva a la arena. El objetivo era que uno de ellos agarrara la cola del buey mientras colgaba de lado de la silla tirando de la cola con fuerza suficiente para hacer que el animal cayera, golpeando en el suelo. Sospecho que a la gente de PETA no le gustaría esto.

De todo, lo más agradable fue lo organizado y eficiente que estuvo todo, un evento casi inmediatamente después del otro. Ausencias notables fueron las de los comerciales entre eventos y los cientos de carteles de publicidad que vemos en todas las paredes de los estadios deportivos de los Estados Unidos.

Ver más fotos del rodeo cubano en: http://www.pbase.com/wkimages/cubanrodeo

Haga clic sobre las imágenes reducidas para ver todas las fotos de esta galería. En tu PC o Laptop, puedes usar las flechas direccionales del teclado para desplazarte dentro de la galería. En dispositivos móviles, utilice las teclas en pantalla.