Los Industriales seguirán siendo noticia

Vicente Morín Aguado

Foto: Caridad

HAVANA TIMES — Finalmente los Tigres avileños dejaron al campo a los Leones habaneros, conquistando el mes pasado su primer título nacional. Muy merecida victoria que, sin embargo me inspira a un comentario sobre los perdedores, más allá de los conocidos resultados en el terreno de juego.

Algo es cierto: cuando Industriales está en los Play-off, los estadios se llenan y hasta las mujeres en las casas dan licencia a sus maridos para abandonar las telenovelas y seleccionar en la TV el canal deportivo.

Conjunto emblema y problemático a la vez, nadie en el país puede sustraerse a tomar partido frente a ellos. Si les preguntáramos a muchos de los que hoy celebran el triunfo, ¿dónde nacieron?, la sorpresa es que muy pocos en Ciego de Ávila, a no ser que viajáramos hasta esa provincia.

Intentaremos un poco de historia, en especial de esa que muchos no quieren recordar, para explicar el asunto.

Del pasado, lo más negativo ha sido que en dos ocasiones las autoridades requirieron, y además sancionaron, a varios jugadores “azules” por vender juegos, de acuerdo con los apostadores que lucran a partir de los resultados en el terreno de competencia.

Algo extraordinario acompañó con el tiempo el justo actuar contra los corruptos: uno de los sancionados, Rey Vicente Anglada, quien fuera además miembro de la selección nacional, al paso del tiempo llegó a manager del team capitalino, alcanzando inclusive la máxima autoridad en el muy mimado conjunto “CUBA”.

Así son de polémicos los Industriales. Agreguemos que desde dos décadas y hasta hoy, ningún otro colectivo atlético ha aportado tantos peloteros al Baseball organizado de Estados Unidos. En total pasan de cincuenta. Como se sabe, las salidas del país son generalmente ilegales y sus protagonistas, considerados “traidores”. Entresaco dos de ellos, con prominentes resultados en “Las Mayores”, Kendry Morales y Orlando “El Duque” Hernández.

El Equipo de La capital de todos los cubanos” convoca a multitudes, además de conectar millones de personas con la TV o la Radio. Es aplaudido o rechiflado, pero jamás ignorado. La Habana sobrepasa los dos millones de personas, con un alto porcentaje de inmigrantes de las provincias.

El Estadio “Latinoamericano” puede recibir hasta sesenta mil espectadores, pero aquí siempre estarán divididos en los “pro” y los “contra” Industriales.

Foto: Caridad

Se trata de la ciudad llamada jocosamente “la de los dos millones”, por aquello que los chistosos explican diciendo que se trata de un millón de habitantes y otro millón de policías. Lo curioso es que la percepción popular dice que la mayor parte de los agentes de la autoridad son inmigrantes, principalmente orientales.

Agrego que existen limitaciones legales para emigrar por propia voluntad hacia Ciudad de La Habana.

De la historia más reciente no puede olvidarse el último título conquistado por los azules de la capital en el año 2010. Comenzaron mal los Play-Off, a los cuales arribaron como el último de los clasificados. Sin embargo, en medio de una de esas riñas tumultuarias que lamentablemente suceden en La Pelota, recibieron una soberana paliza en el Estadio “José Antonio Huelga” de Sancti-Spíritus.

Típico de la prensa nacional, hicieron oídos sordos al suceso, pero los tiempos cambian y abundan hoy en los bolsillos de los cubanos algunos celulares con cámaras fotográficas. La noticia viajó por el mundo, aún cuando fuera de nuestro país estos hechos parecen un tanto “normales”, porque suelen suceder en otros muchos espectáculos deportivos.

Como bien apuntara en la revista “Palabra Nueva”, órgano de la Arquidiócesis Católica de la Habana, el periodista Nelson de la Rosa Rodríguez, Industriales elevó su Alter Ego tras los hechos en tierras espirituanas, convirtiéndose en otro equipo. Liquidó sucesivamente al favorito pre-competencia, Sancti-Spíritus y al entonces campeón nacional, provincia Habana.

¡Había que ver los rostros y las acciones de los peloteros azules! Jugaban poseídos, prácticamente como en un acuerdo entre ellos, con la obsesión por la victoria, que finalmente alcanzaron ante Villa Clara, varias veces aspirante a la corona.

Ahora los muchachos de la capital vienen dirigidos por Lázaro Vargas, quien fuera paradigma de los peloteros habaneros. El nuevo DT parece una persona en la madurez plena. Años atrás, como atleta, fue separado de un colectivo capitalino por un polémico director llamado Servio Borges, quien fuera durante años la máxima autoridad del Béisbol en nuestra patria.

Industriales es como la capital a la que representan: ciudad cosmopolita; de turistas; embajadas; de la administración de los destinos del país y los problemas nacionales magnificados por su millonaria población.

Nunca olvido que en un documental lamentablemente muy poco divulgado en Cuba, el cineasta Ian Padrón, ahora popular con su filme “HavanaStation”, le hace una pregunta al célebre “Duque” Hernández y este, levantando hasta las axilas su camiseta de los New York Yankees, muestra debajo la del equipo azul cubano.

“He jugado con los dos mejores equipos del mundo”- Respondió el gran atleta-. Le faltó decir, a mí entender, que también había jugado y ganado un título olímpico con el otro conjunto grande, el de las cuatro letras: CUBA.
—–
Vicente Morín Aguado: [email protected]

One thought on “Los Industriales seguirán siendo noticia

  • El autor de este artículo está reflejando una imagen negativa del equipo Industriales, típica de algunos aficionados que detestan al mencionado equipo. Nada se gana con repetir el rumor de que aquellos peloteros presuntamente vendieran ciertos juegos, rumores que nunca pasaron de ser eso, rumores sin pruebas, nacidos del disgusto de los que se decepcionaron con su derrota y perdieron dinero en apuestas que eran su única y personal (i)rresponsabilidad. Las autoridades beisbolísticas se comportaron de manera vergonzosamente débil y retiraron a la fuerza a deportistas que no hicieron otra cosa que su mejor esfuerzo… contra otro equipo que lo hizo mejor. La mejor prueba de la reivindicación es precisamente la designación de Rey Vicente Anglada, uno de los sancionados injustamente, como director del mismo equipo Industriales unos años después, por cierto conduciendolo a nuevos títulos y glorias.
    Los miembros del colectivo HT han sufrido en carne propia la difamación. Tienen la suficiente sabiduría como para no repetir ese error contra otros.

Comentarios cerrados.