La mirada del otro y más

Irina Echarry

Muestra de filmes de nuevos realizadores. Foto: Caridad

HAVANA TIMES, 2 de Mar. — Dentro de la Muestra de Nuevos Realizadores que se dió la semana pasada en La Habana, hubo una competencia que comprende a los artistas de otras regiones y sus puntos de vista sobre los cubanos. Animados, ficción y documentales que desarrollan una misma temática aunque con distintos enfoques.

Este año, en documental, concursan dos egresadas de la Escuela Internacional de Cine de San Antonio de los Baños.

Uno de los problemas que más hiere a los seres humanos es la falta de comunicación. ¿Cómo solucionar eso cuando hay que convivir juntos y no existen herramientas que faciliten la interacción?

Una madre que no brindó cariño a sus hijos cuando más lo necesitaban, los hijos que no se entienden y se comportan como extraños: el varón tiene retraso y dice que no conoce otras palabras que no sean “loco, anormal o retrasado”; la hija afirma con dureza que no son una familia, “somos tres personas que viven bajo el mismo techo.”

Bajo el mismo techo, de la mexicana Talía García Aach nos dice que la solución pudiera ser el amor, pero si el amor también está ausente, solo queda resignarse.

Otra mirada llegó desde Perú, la de Milagro Farfán realizadora de La tarea nos confirma la validez del amor en toda su magnitud.

Sayné es una niña inteligente, vivaracha que vive en armonía con la mamá y Mirna, la novia de la mamá. Aunque la niña sabe que su familia es algo diferente, ella no se siente distinta de los demás. El documental muestra la relación de armonía entre las tres, aún cuando la niña llora o se pone celosa de Mirna.

En un lenguaje muy orgánico, se asume la naturalidad de las diferentes orientaciones sexuales, demostrando que la verdadera aceptación del otro se puede alcanzar  si dejamos atrás los prejuicios y tabúes.

Buenas propuestas en esta competencia, esperemos que el jurado decida por una de las dos.

LA VIDA COTIDIANA

Para los que estamos acostumbrados a no perdernos la Muestra de Nuevos Realizadores no es extraño encontrar, en esta novena edición, obras impactantes que exploran la vida cotidiana de los seres humanos.  Una amplia gama de temas, que aunque recurrentes, han aportado nuevas miradas de la situación social de la Cuba de ahora mismo.

El exilio fue abordado por Javier Labrador y Juan Carlos Sánchez en el documental  HABANAver.T.a 31kb/seg.  Correspondencia electrónica entre dos mujeres: una vive fuera de la isla obsesionada con los recuerdos, con el pasado.  La otra vive en Cuba, atormentada en un presente que no le ofrece muchas posibilidades para la felicidad.  Voz en off, imágenes de la Habana captadas en diferentes momentos acompañan los textos, un final dramático: la amiga que está afuera regresa enferma, la que vive en Cuba decide salir a buscar otras opciones. La distancia continuará, ¿la seguirán acortando los correos electrónicos?

Otra realidad vigente es la que expone Yamada Prdida, de Javier Arévalo Felipe, documental que mezcla una historia de ficción (que simboliza a miles de personas) y entrevistas directas en la calle, para investigar sobre el impacto del teléfono móvil en nuestra sociedad: el uso, los precios y las diferencias que establece.  Desde el título se hace referencia a uno de los problemas que entraña la rapidez con que hay que escribir, lo que genera errores de ortografía que luego se convierten en norma entre los que envían o reciben mensajes.

Dany y el club de los berracos, animado de Víctor Alfonso Cedeño que se adentra en el mundo de los adolescentes: sus conductas, deseos y frustraciones.  Dany tiene problemas para relacionarse, no está conforme con su físico ni con la poca aceptación que tiene entre las muchachas de la escuela.  Decide seguir los consejos del amigo: mentirá a Amarilis para que se sienta a gusto con él.  A partir de ahí, Dany se convierte (él mismo) en un héroe que salva gente de un volcán en erupción, viaja a conocer a Don Omar y se hacen grandes amigos, hasta se atreve a decir que Amarilis es su novia.

Pero aparece el novio real de la muchacha y Dany no tiene otro remedio que confesar sus mentiras.  El humor caracteriza todo el animado lo que hace que un público diverso lo disfrute.

Raúl se nos presenta como Vanguardia por varias veces en su trabajo, hijo preocupado por la madre enferma, respetado en su pueblo, que tiene una vida aparentemente apacible, pero un tormento interno lo perturba.

Se angustia al pensar qué dirían su madre o los vecinos si descubrieran que le gusta mirar a las mujeres desde lejos y masturbarse escondido entre las hojas de algún arbusto.  El mundo de Raúl, en solo 20 minutos, se nos hace cercano.  Jessica Rodríguez y Zoe G. Miranda apuestan por la sinceridad del personaje, sin juzgar, sin establecer qué está bien o mal, lo dejan hablar de su cotidianidad y sus deseos para que lo conozcamos.

Luis Miguel Cruz en Inmóvil ofrece testimonios de antiguos proyeccionistas sobre el Cine Móvil, un proyecto cultural que visitaba los sitios más intrincados de las montañas para exhibir películas a los campesinos, y que desapareció sin que nadie pueda explicar porqué.  Un recorrido por la nostalgia de los que llevaban alegría en imágenes para compartirla con niños y adultos que viven alejados de la civilización.

Todo esto se puede ver en la muestra.  Angustias, recuerdos, conflictos humanos, encuentros, esperanzas.  Los jóvenes realizadores de la isla tienen mucho que contar.  Esta edición novena lo reafirma, más allá de los que resulten premiados, la oportunidad de ver los materiales ha sido un privilegio para los cubanos.