Cuba y la lucha de los Tamiles

Por Ron Ridenour

Ron Ridenour (4to de la derecha) presentando “Tamil Nation in Sri Lanka” y “Sounds of Venezuela”.

HAVANA TIMES, 29 nov — “La injusticia en cualquier parte es injusticia en todos lados”, así comienzo normalmente mis presentaciones en una gira de tres semanas por varias ciudades y cuatro estados de la India. La famosa expresión de Martin Luther King Jr. se complementa con las ideas internacionalistas de Fidel Castro y Che Guevara. (1)

El motivo de mi viaje es la publicación de dos libros que escribí: “La nación tamil en Sri Lanka” y “Sonidos de Venezuela”. Mi tema principal aquí es discutir por qué Cuba y la Alianza Bolivariana (ALBA), en la que se integran ocho países, se han puesto del lado del genocida y brutal gobierno de Mahinda Rajapaksa en la matanza, sin sentido, de cientos de miles civiles tamiles durante las últimas etapas de la guerra de liberación en Sri Lanka, y cómo un movimiento de masas puede lograr que se haga justicia. (2)

El pueblo de Tamil luchó de forma pacífica durante 30 años para lograr derechos de igualdad con la mayoría cingalesa pidiendo simplemente que su idioma y religión fueran reconocidos a un mismo plano, y que se les permitiera obtener las mismas oportunidades de empleo y educación que los cingaleses.

Se encontraron con pogromos asesinos. Así que algunos tomaron las armas y comenzó una guerra civil que duró más de veinte años hasta que las fuerzas tamiles fueron derrotadas en mayo del 2009.

En aquel momento Cuba encabezó la mayoría de miembros del Consejo de los Derechos Humanos que felicitaron a Sri Lanka por su esfuerzo “humanitario” y por derrotar el “terrorismo y el separatismo”.

La mayoría de los tamiles de Sri Lanka y en Tamil Nadu, un estado al sur de la India, a solo unos kilómetros de Sri Lanka, admiraban a Fidel y al Che, y habían seguido la Revolución cubana con entusiasmo.

Después de los sucesos de mayo de 2009 cientos de miles realizaron manifestaciones en Tamil Nadu pidiendo que la India y las Naciones Unidas condenaran a Sri Lanka. La India apoyó a Sri Lanka con armamento y con información como mismo hicieron Pakistán, Estados Unidos, Israel, China, Irán y algunos países de la Unión Europea.

La tristeza y la frustración sufrida por la derrota fue tanto que 18 tamiles se suicidaron, la mayoría pegándose candela.

Conversé con varios cientos en 15 presentaciones en sindicatos, grupos de base, partidos políticos, escuelas y tres universidades. Participé como orador invitado en una protesta de decenas de miles de personas en la que dos docenas de grupos y partidos políticos pro-tamiles Eelam (lo que significa nacionalidad para los tamiles) unieron para demandar que los líderes militares y del gobierno de Sri Lanka fueran investigados y enjuiciados por crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad (ver el reporte de los expertos de las Naciones Unidas). Cuando levanté mi puño mientras usaba una camisa con la figura del Che, la multitud mostró su conformidad a gritos. (3)

Dificultad para entender el porqué

La mayoría que conversaron conmigo querían conocer mi opinión acerca del porqué Cuba, esta tierra de solidaridad, se había puesto del lado de los “explotadores”, refiriéndose a los principios de Fidel. Unos sabían que, algunas veces, los estados toman decisiones basadas en conveniencias políticas. ¿Pero cuál podía ser la ventaja de estar del lado de Sri Lanka cuando los otros gobiernos lo hacen sin importar su política o el tipo de su economía?

Mi respuesta inadecuada sobre la posición de Cuba fue:

Su percepción de la unidad entre los estados soberanos dentro del Movimiento de los No Alineados (NOAL), lo que está relacionado con el absolutismo de Fidel sobre la unidad vs separatismo.

También, la posición de Cuba contra el uso de tácticas terroristas en las guerras de guerrillas, ante lo que sucumbieron, en ocasiones, los grupos armados de Tamil, tales como los Tigres de Tamil Eeland (LTTE), y el papel que recientemente juega China en el apoyo económico y militar a Sri Lanka que le permite tener un importante puerto militar y comercial allí, unido a la actual dependencia económica de Cuba con China, y también su papel económico en muchos países latinoamericanos y africanos.

¿Pero dónde está la moralidad de esta decisión? La respuesta puede suponer la necesidad de tener una clara separación de poderes entre el estado y el partido, tener una población informada sobre la política exterior, así como las políticas de la nación.

Sugiero a mis amigos que se comuniquen con los movimientos de base, con los movimientos indígenas de los Andes, con sindicatos y partidos políticos y finalmente llegar al nivel estatal.

Las nuevas constituciones en Los Andes garantizan igualdad de derechos a los indígenas, reconociendo sus idiomas al igual que el español. Esto es lo que quieren los Tamiles.

Las voces de Estados Unidos y de la Unión Europea sobre las “violaciones de los derechos humanos” son falsas porque intentan justificar los ataques contra países con los que no están de acuerdo, como es el caso de Cuba, y ellos usan esto como una excusa para invadir naciones por sus recursos naturales sin importar si el gobierno de ese país viole, o no, los derechos humanos.

Es hora de unir fuerzas para boicotear a Israel y a Sri Lanka. Debemos decirle a Cuba y al ALBA que las razones que tienen para oponerse al genocidio israelí contra los palestinos, en realidad, son las mismas por las que deberían apoyar a los tamiles contra el chovinista, neoliberal, pro-imperialista y racista gobierno cingaleses de Sri Lanka.

Hay que recordar a Cuba lo que acaba de plantear al Consejo de seguridad de las Naciones Unidas, según se reportó el 15 de noviembre (4). “Cuba reiteró al Consejo de Seguridad su compromiso de luchar contra el terrorismo en todas sus manifestaciones llevado a cabo por cualquiera y en cualquier lugar.”

Los gobiernos y las organizaciones solidarias que apoyan a Cuba y a otros países del ALBA también deberían pedir que cumplan con su compromiso de luchar contra el terrorismo “sin tener en cuenta la motivación, especialmente el terrorismo de estado”, como afirmó Cuba en las Naciones Unidas.
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NOTES:
(1) Fidel dijo al escritor y fotógrafo Lee Lockwood “Los explotados de todo el mundo son nuestros compatriotas, y los explotadores de todo el mundo son nuestros enemigos…todos los revolucionarios del mundo son nuestros hermanos”
“El internacionalismo proletario es un deber, pero también es una necesidad revolucionaria. En esa base educamos a nuestro pueblo”. Tomado del libro del Che “El Socialismo y el Hombre”.

(2) http://dissidentvoice.org/2011/11/cuba-alba-lands-are-tamils%E2%80%99-natural-allies/

(3) http://dissidentvoice.org/2011/11/cuba-alba-lands-are-tamils%E2%80%99-natural-allies/
http://www.theweekendleader.com/Causes/815/Eelam%E2%80%99s-Left-turn.html

(4) http://www.escambray.cu/Eng/Special/cubavsterror1111151124

2 thoughts on “Cuba y la lucha de los Tamiles

  • El problema viene,de los “intereses” politicos,”reconocer”la “separacion” de los Tamiles,es “reconocer”,tambien al pais Vasco,en Espana,o a Kosovo,Cuba tiene relaciones con casi “todo el Mundo”o digamos la Guerra que desato Gerogia,en “reclamacion” de su territorio,vino la “guerra con Rusia”,con el “apoyo” de EEUU, y la Union Europea…..la Pregunta,quien era o es el presidente de Georgia?en aquel entonces…pero en este caso,en una “guerra entre un gato y un raton”…pero en fin es tan “complejo”,creo que la politica de Cuba,se “basa” en eso buscar un “equilibrio”,siempre la”tildaron ” y “criticada” de exportar la revolucion,creo en un tiempo SI,pero los tiempos “cambian”? y hay que adaptarse a esos tiempos…creo que es solo eso!!

  • Otrodiferente,
    No, no se puede ser “solo eso,” los tiempos cambian. Claro no es la posición de Cuba de declarar que los vascos ni los tamiles deberían tener tu propio nación pero tampoco es el papel de un país asi llamado revolucionario-solidario con todos los pueblos a no solamente ignorar el genocidio de los gobiernos de Sri Lanka contra los tamiles pero además aplauder ellos por ser “humanitario” y por a combatido “terrorismo o separatismo”. No, el Cuba de ayer, un Cuba orgullo de su solidaridad internacionalista, a cambiado y ha cambiado por el peor.

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